Este escudo está esculpido en jaspe y, posiblemente, sea uno de los dos que estaban previstos hacer esculpir en 1576, según los pactos que Luis d’Icart estableció con el cantero tortosino Vicent Burel.
La figura principal es la flor del cardo, emblema de la saga, que aparece en el primer cuartel. Encima del blasón se puede ver el águila imperial que, dados los muchos servicios prestados en Italia, el emperador Maximiliano otorgó al linaje según un privilegio del 1517.
